sábado, 9 de mayo de 2015

el cine como aprendizaje de vida

Nan Goldin, Variety Booth, New York City, 1983.

El cine y sus  imágenes en movimiento. La fotografía, la trama, la música, las historias que como cuentos, te van llenando el pecho de mociones. El ver otras personas y paisajes que siendo lejanos son tan cercanos. 
He pasado parte de mi vida en el cine. Soy una devoradora de imágenes y de textos. Y forman parte de las cosas más importantes de mi vida. He aprendido del cine casi todo lo que sé. He descubierto que el que ama mucho siempre pierde. Que en las grandes películas los facinerosos del hampa y la economía manejan las vidas de los otros con total impunidad, y no pagan por ello.

Que el poder corrompe, que la compasión salva. Que hay gente que no tiene casi nada y sabe lo que es la vida. Que algunos que tienen todo pierden su tiempo buscando tener algo más. Ese algo que como un vampiro chupa la sangre de la vida, dejando días atrás, que nunca van a volver. Cauterizando emociones que a fuerza de entrenar y endurecerlas se quedan en un corazón infartado por el que no circula la sangre de la empatía.

(fotografía de mi colección que me recuerda los momentos delante de la taquilla esperando para ver una obra maestra) 

4 comentarios:

Genín dijo...

No solo no pagan por ello, lo grotesco e injusto es que los que pagamos siempre somos nosotros, sus victimas... :(
Besos y salud

Pilar Mandl dijo...

Preciosa fotografía, siempre has tenido un gusto excelente en tu colección... Dan ganas de pagar ls dos dólares y aprender un poco más de la vida...

David dijo...

Suscribo texto, y además me encanta la foto. Como dice Pilar es preciosa. Te la robo por si igual algún día la uso de cabecera para Safari.
Un abrazo.

Blue dijo...

Del cine también se aprende que las cosas a veces no son como en las películas. Y no me refiero a lo que cuentan sino al metraje. Hay veces que uno quisiera alargar, y otras meter la tijera.
Foto que parece un cuadro.
Besos.