jueves, 14 de mayo de 2015
la obligación de vivir
Vivir obliga. Te debes a la vida como dicen que hay algo debiéndose a los hombres, aún por saldar. Te debes a los días y al cielo redivivo, olvidado frente al peso de tantos edificios nublándote la boca y la palabra. A los semáforos azules del destino y la ausencia perpetua de quien fuiste. A todo eso y más: a quien te llama perdiéndose tu cuerpo y se desdice, a quien llora la mitad que cree perdida y se entretiene fornicando, a los amigos no amigos y a los padres. No padres. No. Madre. A la vida. Te debes como el mundo debe sus árboles y el cielo sus tormentas. A ti mismo y a quien dices. Te debes y no estás. Y no te ves. Y no te encuentras.
(regalo de mi amiga y poeta María Alcantarilla)
(después de un gran susto la semana pasada y por casualidad maría publicó esto en su facebook)
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6 comentarios:
No debes, estás, mientras estés...
Besos y salud
Si Genín, estoy y eso es lo que importan. Un abrazo.
Hola soy cristopher me ha encantado tu publicación y para ti como podría uno encontrarse si esta perdido? Creo que estoy en esa situación, me llego tu publicación. Saludos
Ahora entiendo foto y texto.
Bonito regalo, desde luego. De palabras no se vive, pero ayudan muchísimo.
;-)
Besos, Marcela.
Gracias Cristopher, te encuentras de sopetón al dar la vuelta a una esquina. Un saludo.
Blue, era difícil si no sabías nada. Aún me siento las manos alrededor del cuello. Susto.
Un beso, amiga.
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