La vida es un melodrama: mitad comedia y mitad drama, y creo que la mejor manera de manejarse por ella es que discurra como un río calmado en su superficie y atravesado por los remolinos en su interior.
Pocos lo consiguen, los calmados y sometidos en la superficie terminan por ser tibios, y los desbordados terminan ahogados en sus propias turbulencia.
Ahora bien, yo soy de las que me gusta mucho más lo revuelto que lo calmo. Desde los paisajes a los rostros.
Siempre he creído que la mejor manera de mantener la compostura y permanecer de acuerdo y callado es siendo cadáver. Eso lo voy a tener seguro. Y vivir es l contrario. En vida hay que probar lo sísmico, y lo abisal.
(Foto Fredrikholm)
4 comentarios:
Mmm, a veces los remolinos de mi interior consiguen salir a la superficie... Está mal????
Besosss.
No eso es lo bueno, dejarlos que salgan. Yo dejo que salgan porque dentro me producian eso que llaman turbulenciasinteriores,je,je.
Saludos Julia
Nada de acuerdo contigo, aunque de eso se trata...la paz y el mrmullo son mis aliados.Un saludo
Vale Hydro me gusta que haya gente que no estando de acuerdo lo exprese. A veces me gusta más los desacuerdos que los acuerdos.
De todos modos yo estoy muy poco turbulenta.
Un beso.
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