jueves, 22 de marzo de 2018

parejas de conveniencia



Las relaciones de conveniencia recuerdan esos manuales de gastronomía que enseñan a cocinar con las sobras. ¡Vamos a hacer algo con lo que aún queda! Será menos sabroso que el plato original, pero podrá ponerlo en la mesa sin tener que avergonzarse. Con los restos del cocido usted puede hacer puré, croquetas, garbanzos aliñados, ropa vieja..., esa comida cubana.

Un ejemplo de pragmatismo y decencia: no tirar nada a la basura ni dejar que se pudra en la nevera. Aprenda a vivir con los restos. A sobrevivir. Olvídese del amor que incomoda, y que incluso puede ser catastrófico porque no solo no tranquiliza sino que inquieta. Como unas zapatillas y una camiseta a las que estamos acostumbrados y están desgastadas por el tiempo.

Aprenda a vivir tranquilamente con sabores de los de toda la vida.

3 comentarios:

Genín dijo...

jajaja Unas reflexiones muy inteligentes, con consejo final, nada desdeñable, a tener muy en cuenta :)
Besos y salud

Blue dijo...

Al final todas las relaciones son de conveniencia porque a todos nos conviene que nos quieran.
Besos, Marcela.

marcela dijo...

gracias amigos de conveniencia,jaja