jueves, 19 de enero de 2012

Baudelaire, el breve testamento



Baudelaire, el más arcaico de los modernos, el verbo más poderoso que haya resonado en labios humanos (Proust), la prosa cargada de fluidos eléctricos (Renard), el solitario, impávido defensor del derecho a contradecirse y del derecho a irse, el que admiraba a Chateaubriand por ser el gran aristócrata de la decadencia, el que entró en la zona más oscura y peligrosa de aquello que se puede pensar, se despidió dictando un breve testamento:
"Toda la chusma moderna me horroriza. La virtud, horror. El vicio, horror. El estilo fluido, horror..." escribió Baudelaire en su magro testamento. (el boomerang)


Llegados a ese punto, el crítico insigne debió recibir a la muerte con verdaderas ganas. En ocasiones, un excesivo conocimiento lleva a la desesperación. O quizás, hacía su última crítica literaria.

7 comentarios:

India dijo...

Bueno, pese a la crítica, qué mayor paz que irse desahogado, no? Parece que uno deba irse perdonándolo todo... y tal vez no, no sea así.
Achuchones

marcela dijo...

India, tienes mas razón que Baudelaie. Y siempre pones la pomada en la llaga. El dedo puede infectar y tuno eres de esas. Te admiro y te quiero.

Say dijo...

Me encanta Baudelaire. Me encanta Proust y lo que dice Proust. Y también lo que opina Renard (tengo los diarios de Renard). Y me encanta lo que ha dicho India.

Desde luego mi testamento sería muy parecido a las últimas palabras de Baudelaire. Diría las verdades de Perogrullo. Una parte de la sociedad es repugnante.

Me quedo descansando cuando digo lo que realmente pienso.

Yo soy una de las personas que me iré desahogándome. No perdono. No me da la gana caer en la hipocresía y el cinismo de los que quieren aparentar y quedar bien.

Siento desprecio por los que dicen que perdonan un hecho imperdonable. Cuántas veces he escuchado, ante la traición, o el engaño o ante la brutalidad, la violación, el asesinato, “perdono pero no olvido”. Eso no tiene semejanza con el amor. El amor no perdona ni olvida. Desea todo lo peor para el que hace daño a sabiendas. Ante esta terrible sociedad, tan profundamente insoportable, que como dice el divino Artaud es "de deshonestidad deliberada e insigne hipocresía”,no miro hacia otro lado, disimulando no saber. Es necesario desenmascarar a los hipócritas.

P.D. me gusta mucho el video de Spike Jonze, no puede comentar allí!, a ver si aquí puedo!

Un fuerte abrazo
Say

Genín dijo...

Creo que el problema está en que esperamos mas de la vida de lo que podemos obtener, de nosotros mismos y de los demás, las cosas son mas simples en su grandeza de lo que podemos imaginar y de estas es de las que debemos aprender a disfrutar, con las que ser felices...
Besos y salud

David dijo...

Entre el texto de la entrada y el comentario de India... no sé qué decir

Blue dijo...

Tenía más razón que un santo si dijo lo que sentía y ya estaba harto de estar harto, pero también me fijo en lo que dices tú, de que "en ocasiones, un excesivo conocimiento lleva a la desesperación".
Seguro que es así, pero no debería.
Besos.

Luis Nieto del Valle dijo...

Quien aspira a ser un diosecillo, se queda en eso: un diosecillo.