Algunos de nosotros somos islas, atrapados en nuestras propios límites. A veces nos visitan naúfragos, son aquellos que pese a vernos en tierra firme se han dado cuanta de nuestra insularidad.
Y no nos consideramos períféricos ni emergentes, porque nuestras ideas simpre han contenido ambas palabras.
Nos aferramos a lo que encontramos, nos basta con lo que tenemos.
8 comentarios:
A veces isla, otras naufrago y me hundo, luego emerjo y floto (no sé nadar muy bien); a veces periférica, casi nunca en el centro ni enfocada. No me basta con lo que tengo y no tengo mucho de qué aferrarme últimamente que no sea la escritura, la lectura y el cine.
El problema radica cuándo no nos basta lo que tenemos y tenemos que vivir dentro de nuestros límites. Otras veces, el problema es la percepción tan clara y nítida, fría y real con la que se perciben los límites cuando los naúfragos se van.
Todas las islas deberían tener un istmo de Corinto.
De las islas casi lo que más miedo me dan son los náufragos jaaaaaaaajajaja
Si fuera isla... me molan unas que salen en la tele en las que los cocos se desprenden sin avisar jijijijiji pero estoy segura de que la palmera sabe cuándo lo suelta jaaaaaaaajajaja
Achuchones!!!
Lo veo irrelevante, en realidad un continente no es mas que una isla muy grande o viceversa...
Besitos y salud
No puedo ser isla, casi ni estar en ellas....necesito que mi mente no sienta limites.....tampoco ser naufrago.
Solo la mente pone limites, y yo la limito para que no lo haga.
Soy una presa que quiere ver todas las acepciones del mito...libertad.
Me gusta leerte.
Hoy he encontrado esta frase que me ha hecho volver aquí:
Me fascina transgredir mis propios limites, y es la realidad la que me supera. de C. Lispector
Un beso
Pues casi tiene razón Genín. Estar en una isla es solo una sensación.
;-)
prefiero ser parte de un archipiélago que de un continente.Un beso
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