Tras una vida de insomnio comenzaremos a olvidar. Porque fuimos lo que soñamos y nos convertimos en lo que dejamos de soñar. Un mundo sin imágenes mentales es una cabeza por la que resbalamos. La vida es un álbum en la que de alguna forma tomamos posiciones.
Toda fotografía es una especie de toma de una pérdida que queremos se convierta en esperanza. Sin imágenes los recuerdos hay que atesorarlos para viajar con ellos a cualquier parte. O quizás a ninguna.
1 comentario:
Últimamente, las viejas fotografías me producen tristeza al asumir que he consumido una gran parte de la cuenta de crédito de mi vida, así la veo yo...
Besos y salud
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