viernes, 8 de febrero de 2013
si tuviésemos alas...
Colette, mirando a través de la ventana de su casa y contemplando cómo palomas y gorriones se desplazaban en vuelos juguetones, dijo:
- En mi opinión, la mayor injusticia de la creación es el hecho de que sólo algunos tengan alas.
Otra gran injusticia, es que tengamos que trabajar por el salario mínimo, cuando hemos nacido para jugar. Dicen los psicólogos que jugar es lo mejor para no tener neurosis.Y trabajar en lo que gusta forma parte de ese juego.
Lo que nos corta las alas es el trabajo impuesto.
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7 comentarios:
Por eso vivimos una vida tan injusta...
La foto parece sacada de la peli "Los pájaros" aunque aquella de Hitchcock era en color...
Besos y salud
Genin,y por eso cuándo las personas tienen miedo de jubilarse, no lo entiendo. Porque jubilarse viene de júbilo.
Besos.
No me da el cuello para mirar si las llevo desplegadas, pero sí que me fastidia mucho saber de gente que sí... que volarían muy bonito si pudieran batir sus alas con libertad...
También pienso en quienes al trabajo impuesto se e suma el lastre de la necesidad... necesidad que lleva a aceptar que te impongan, imposición que mina sumanda a lo demás... y así, me pesa el estómago de pensarlo...
Achuchones
India, es así ya lo dice la boblia "ganarás el pan con el sudor de ..."
yo creo que unos se lo ganan y otros directamente lo roban. Y el único sudor que tienen es en el barco. Mira, creo que el trabajo por necesidad es una condena, y ahí nos tienen pillados. Porque si necesitas aguantas.
Y en fin, homo ludens frente a homo faber.
Quizás consigamos hacer sólo aquello que nos mejora.
Besos
Yo las alas debo llevarlas recortadísimas, porque mi trabajo es impuesto hasta la nausea y no paro de cavilar sobre las diversas formas de asesinar a mi gerente, esa criatura inmunda y viscosa.
Pero que no me falte, claro, que me entran calandracas solo de pensarlo.
Besos alados (insuperable...)
Sí!
Mira, lo de jubilarse de júbilo.
Lo jodido es que encima estás mal porque no tienes trabajo y al final tienes que estar agradecido de poder coger cualquier mierda mal pagada.
Alas para volar fuera de este mundo es lo que uno querría a veces.
Bah! No me hagas mucho caso...
Un abrazo.
Si estar sin trabajo sólo cortara las alas, aún podríamos celebrarlo.
En fin, alas para qué os quiero.
;-)
Besos.
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