lunes, 24 de septiembre de 2012

los pequeños entusiasmos


Actuamos como si la comodidad y el lujo fueran los requisitos principales de la vida, cuando todo lo que necesitamos para ser realmente felices es algo por lo cual podamos sentir entusiasmo.
Perder el entusiasmo por las pequeñas cosas de la vida, es vivir en la más absoluta de las miserias. Hoy he paseado y el sol se desvanecía sin perder su entusiasmo, para volver a salir mañana. 
He entrado en un pequeño café, no había nadie. En la única mesa la propietaria-camarera se había preocupado de poner una pequeña flor. No había perdido el entusiasmo.

fotografía partisana 

9 comentarios:

Genín dijo...

Y yo espero con un desbordante entusiasmo que mañana empiece a llover bien, que la tierra trague el agua, y permanezca el tiempo así unos cuantos días...
Besos y salud

Errata y errata dijo...

Me encanta la foto, el juego de los colores y las formas. Y el texto bien podría ser el párrafo de algún buen libro.
Una entrada entrañable.
Besos

marcela dijo...

Genín, siq uieres convocamos a la tribu para hacer unas llamadas a ese agua que tanto necesitas. Eres mi caballero fiel, te mando un abrazo.

marcela dijo...

Maia, la foto es sencillamente sencilla, como la cafetería y la señora que ya demuestra buen gusto además de entusiasmo.
Besos y mi cariño.

Angi La Fiera dijo...

Vaya, has despertado mi interés por la palabra entusiasmo, y qué sorpresa al descubrir que viene de "en" + "theos" (dios)... Así que el estado de "entusiasmada" es semejante al de poseída por un dios.

Rosario Libertad dijo...

una verdad como un templo, o como una pequeña flor :))


gracias

abril en paris dijo...

Estas sencillas plabras tuyas como la pequeña flor de la camarera me han llenado de optimismo.

Saludos en undia de lluvia, mañana saldrá el sol, seguro.

Frankie dijo...

La vida es una colección de esas pequeñas cosas casi en un ciento por ciento, una sucesión de ellas. Como respirar.

Besos.

fiorella dijo...

Me encanta la foto, el texto...lo pequeño así, cuanto ánimo da. Un beso