lunes, 28 de febrero de 2011

esperando que suceda



 Digamos las cosas como son: el mundo no termina en la fotografía capturada, sino que parte ahí. Una toma realizada por un buen artista puede explicarnos la vida interior de un gorila, el sencillo paso del tiempo por una calle desierta, el dolor, el amor de dos reptiles, la indiferencia de un barco alejándose. 
¿De qué hablamos cuando hablamos de la imagen? Hablamos de imaginar. Sin duda la palabra que más conviene para explicar la fotografía. Lo del arte de escribir con la luz hace tiempo quedó obsoleto. Se escribe incluso a tientas, se mira sin luz, se ve con otros ojos...y dependiendo del ojo que mira, lo que resulta es o simplemente no está.
Hay imágenes que simplemente suceden. Como ese pie. 
(fotografía Saul Leiter)

6 comentarios:

EvitaBlu dijo...

A primera vista se me habia pasado por alto.

India dijo...

Es que es genial...a mí me fascina,me cojo unas voladuras mentales del copón...Me encanta venir a tu casa,a cualquiera de ellas y tomar unas de las alas que nos prestas...
Achuchones!

Blue dijo...

Es verdad...imaginar. ¿Como se puede explicar que uno pueda estar mirando para una foto largo rato sin cansarse, siendo una imagen estática?

Bicos, Marcela.

Genín dijo...

Que guarro y desconsiderado el tio ese del pié!
Salud y besitos

Say dijo...

...ese pie, a la vez que el gesto es espontáneo, está dentro de la secuencia de un pensamiento...es sin duda un trayecto de vuelta, hay una tristeza...

Tu visión sobre la fotografía es profunda...existencial...porque es cierto, cuando vemos una imagen, a partir de ahí, nos vemos a nosotros mismos en algún momento de nuestra existencia, realizada o sin realizar. Imaginamos el movimiento interior del mundo.

Un fuerte abrazo

India dijo...

Jopelines...y ya si leo los comentarios me pillo unas requetepajas mentales...da gusto leer lo que ven los demás...
y unos achuchoncillos,de paso jijijijiji