martes, 3 de marzo de 2009

vivir en el alambre


"Este es probablemente el final de mi vida, caminar sobre ese cable. Y, por otra parte, algo a lo que no me podría resistir, ni haría ningún esfuerzo por resistirme, ese cable me llama. Y la muerte está muy cercana".
Fue apodado "el crimen artístico del siglo" y sucedió el 7 de Agosto de 1974, un día antes de la dimisión de Richard Nixon. Petit realizó su sueño, de colgarse y atravesar a 411 metros de altura la distancia entre las Torres Gemelas. Se sirvió para ello de cuatro apóstoles, y su éxito se saldó con un a detención y posterior análisis psiquiátrico y la ovación del público. “Man on Wire” es uno de los títulos del año, ganador en Sundance y Oscar al mejor documental.El director James Marsh, se mueve igual que el protagonista entre la realidad y la ficción con pocos, pero inteligentes recursos.
El documental no deja de interesar ni un momento con un pulso cinematográfico perfecto."Man on Wire" toma prestado el ritmo narrativo de las películas más sofisticadas y lo utiliza, con un resultado casi de "thriller", dándo una visión de que Petit es un gran artista, que tiene como objetivo llevar a la práctica su perfomance.Una fascinación que crea un sólo hombre, capaz de abstraerse de todo lo que no sea conseguir ese vuelo aéreo, por mucho que sea ilegal. Su magnetismo y clarividencia, su obstinación y recursos además de preparación hacen del funámbulo un ser admirable, en su loca excentricidad.
Los apóstoles que le siguen son en realidad una cuadrilla de tarados de gran pericia técnica. Belleza sin aliento la del hombre colgado del alambre, la policía esperando para detenerlo en la esquina de las torres, y el artista burlándose a lo largo de 45 minutos, en los que se tumba sobre el acero, se arrodilla y saluda a los asombrados viandantes, y va y vuelve.
Entre medias, la belleza de una disciplina tan atípica como el funambulismo, la exquisitez de sus movimientos y la hermosa paradoja de cómo una mente de dudosa estabilidad es un virtuoso del equilibrismo.
Entre la realidad, que da pie a la reflexión poética y la ficción “Man on Wire” es un documental que se degusta como el mejor de los suspenses. No perdérsela.

4 comentarios:

A.L.Zarapico dijo...

Muy interesante, y genial la forma con que lo relatas.

Pilar Mandl dijo...

¡PERFECTO!
Muchas gracias por compartir las cosas buenas, intentaré conseguirlo...
Un beso.

marcela dijo...

Gracias a las dos, me gusta compartir lo que me gusta-redundante redundancia-en la línea de Getrude Stein.

MBI dijo...

Pura filosofía...........
No se puede llenar de más miga.......
La vida que con la la vida se arriesga..........
demasiado peligroso para el resto.