domingo, 3 de febrero de 2019

pensamientos razonablemente apasionados


Los que repudian las pasiones no llegan a darse cuenta de que la razón se enciende con su llama. La razón puede convertirse en un fuego que arde sin parar en un corazón antes razonable.
(por eso me gusta islandia porque es un país de hielo y fuego)

1 comentario:

Genín dijo...

Pero con un corazón ardiente, tambien se puede razonar, te lo digo por el mio...jajaja
Besos y salud