jueves, 17 de abril de 2014

formas de pasar el tiempo



A L.K. después de aquello, le era difícil respirar. Le producía un extremo dolor soportar la existencia propia y la de los demás. Una terrible incógnita, el porqué de todo. Así que sin tener la menor idea de qué hacer con su vida, cogió el primer tren para Dublín, buscó trabajo, conoció a una mujer, se casó y tuvo hijos.

Nota: Todo lo demás, incluido ese dato, puede ser aleatorio, es decir, que bien puede el personaje coger un tren para Oslo, Londres, Barcelona, o no cogerlo. Y también puede no casarse. Es decir, todo es accidental y fortuito, menos el dolor y la angustia, que han de ser fijos.
Julia Otxoa

8 comentarios:

Genín dijo...

Claro, como exiliarse de todo en mitad del campo andaluz para el resto de su vida, ya ves que lo comprendo muy bien :)
Besos y salud

marcela dijo...

Genín, es que ya algunos vivimos exiliados en cualquier parte. Estoy a punto de hacerlo en la huerta valenciana.
Besos y salud.

Blue dijo...

A veces acabo por pensar que el quid de la existencia es respirar y que el pulmón es al menos tan importante como el corazón.

Besos, Marcela. Veo que te arrimas a la costa.
;-)

Carmela dijo...

Yo me exiliaría desde ya en Zahara de los atunes, no pido mucho, una habitación dando al mar a pie de playa...lo demás me sobra, pero hay días que daría todo por estar y vivir allí.
Marcela, que te veo de fallera, jajaja
Besos grandes...y a los contertulios :-)

marcela dijo...

BLue, ha sido una decisión aleatoria, confusa y sin mucho pensamiento. De repente me encontré con una casa de huerta, y no me venía mal dedicarle un poco de obsesión para trasladar otras. BUeno te contaré por mail. Ahora estoy en fase de recuperación de estilo homeless-chic.
Besos.

marcela dijo...

Carmela, Zahara de los Atunes, siempre me ha gustado ese nombre y no lo conozco pero de este año no psa, me voy a bajar a veros y ver in situ esos mares y playas que retratas. Un beso.

fiorella dijo...

Leí tus anteriores posts...muy de acuerdo con ellos. Será cuestión de subirse a algún transporte y disparar un poco de tanta isla y poca empàtìa reinante. Un abrazo.

marcela dijo...

Fio, así es hay que alejarse de las islas porque de puro aburrimiento te crece la barba.
Un beso.