martes, 24 de mayo de 2016

quiero saber como nombrar desolación,


Necesito que me den el nombre de las cosas que tengo que callar porque me hieren,
El nombre que, aunque parezca raro, sea también que cubra todo como un edredón de Ikea que al ser casi cuadrado no tiene parte de arriba ni de abajo y uno lo pone según cae y queda bien. El que tarareamos al viajar en coche de vuelta a casa -tras dormir con la persona amada, con la gata amada o el libro amado- y aquél nombre que tiene la textura de la piel acariciada o el calor felino y se abre suavemente aunque sea un nombre cualquiera. Todo menos desolación.
Quiero saber como nombrar ciertas cosas inombrables de puro gastadas. dame ese nombre exacto y a la vez impreciso de todas las cosas. Déjame que lo cante, que lo chupe como un caramelo de menta, que lo desgaste en la boca sin decirlo. Déjame que lo calle. Que lo abrace. Que lo arrope. Déjame que no lo diga porque no me gusta como suena. Invéntame un nombre. No quiero ese nombre génerico llamado desolación. 
 

domingo, 15 de mayo de 2016

time is golden


La información va demasiado rápido y no se fija en nuestras neuronas.
El tiempo se nos escapa como arena entre los dedos.
Y el conocimiento cada día se mueve menos.
Sin embargo lo único que es irrecuperable es el tiempo perdido.

sábado, 7 de mayo de 2016

ese cigarrillo de después.


El amor no sirve para fumar un cigarrillo cuando se ha terminado, sirve para aprender cosas importantes, como la empatía.El amor tiene muchas caras no es una tómbola dónde te toca. Pocos son un éxito, muchos un fracaso seguro. No está aquí para satisfacer las expectativas fáciles; no está aquí para complicar, esa no es la recompensa. Y la recompensa solo es que te quieran, no que te complkquen la vida.

miércoles, 4 de mayo de 2016

un verso sobre el ombligo abandonado




Vivan sin vivir en ustedes. Salgan de vez en cuando y dejénse sentados en el sofá. Aprendan a estar sin estar. Porque de verdad todo es posible y cuando las palabras no saben qué decir, empieza la poesía. Por eso el verso no necesita llegar hasta el final de la línea, incluso es más verso cuando se la salta.

Por eso no se pongan metas finales sino que cualquier meta, sea siempre una meta volante. Sujeten con amor  las cuerdas vocales del lenguaje.Viajen por carreteras secundarias. Detrás de un gran beatnik siempre una gran beatwoman maltratada por la vida o sus sucedáneos: el alcohol y la soledad. Cosas de no creerse pero que ocurren. Huían en motos de sus soledades, pero se olvidaban de que iban acompañados por ellas.


Y sean conscientes de que la soledad, esa que trata no de estar solo, sino acompañado en las ocasiones en las que salgan de sí mismos, es la libertad y el amor total. Es decir abandonar el ombligo es el mejor verso que uno puede escribir.

domingo, 1 de mayo de 2016

Para comerte mejor.

 Desde ahora os digo que tanto master-chef ha acabado con la nueva cocina. Esa que tardan mas tiempo en empatar que en comerla. Lo que más me divierte en ésta etapa de mi vida es cocinar. Pensaba que el arte me evitaba no volverme loca con la increíble confusión de lo cotidiano. Después de tantos años, tanto teórico pos-braudillard, neo-kantiano y post-estructuralista, terminaron por llevarme a la inanición mental.Me volví anoréxica de la emoción. Así, que he resuelto crear platos de antigua-cocina. Nada de esferificaciones, ni glutamatos, nada de humo de vieiras al fino aroma de musgo cantábrico. No, lo que hago es cocina de toda la vida.
Perder el tiempo cocinando es una vía directa hacia lo eterno, y encuentro que la medida del mundo es inversamente proporcional al corte fino del perejil.Mientras, atender al hervor de los tomates hace que mi pensamiento se diluya en fluidos gaseosos que casi me llevan al.....------
Ahora, invito a comer, a los amigos. Y casi todos agradecen que haya dejado el arte, para pasarme directamente a la cocina, de la que nunca debí salir. Yo que era post-feminista...
Comentario sobre la imagen: Aquí, ilustrando ésta entrada debería ir un plato de esos de fotografías de revista, platos que hace Adriá, que les parecen más artísticos-elegantes que el propio arte. Sin embargo, mi dedicación al mundo fotográfico, hace que aparezca la fotografía que ven que sí tiene concepto y es arte. No bella, arte. Además, explica muy bien con el libro que aparece la saturación entre teoría y banalidad.